
Un momento de tensión e incomodidad se vivió en pleno programa en vivo cuando una comerciante del conurbano bonaerense tomó el micrófono y contó la cruda realidad que está atravesando. Su testimonio fue tan claro como desgarrador: “Ayer a las 9 de la mañana recibí listas con 20% y 30% de aumento”, expresó con la voz quebrada y un rostro lleno de angustia.
«Estoy preocupada. Esta inflación me asusta», confesó, mientras el estudio quedaba en silencio absoluto. Nadie se animó a interrumpirla, porque lo que decía era imposible de rebatir. No había discurso técnico ni relato político que alcanzara para tapar lo evidente: la situación económica golpea con fuerza a los pequeños comerciantes.
